Lo reconozco, me cuesta salir de la cama cuando suena el despertador. La galbana me invade, el cuerpo me pesa, diría que en lugar de huesos mi esqueleto lo forman piezas de acero oxidado; sin embargo, una vez logro ponerme de pie me sacudo la pereza y salgo a caminar. Y os lo aseguro, no hay central de energía más potente que el verdor de los árboles, caminar entre ellos recarga mi dinamo interno, me ayuda a enfrentar el día.
Quiero compartir con vosotros unos chispazos del poder verde que me rodea en mis paseos matutinos.
 |
| Chopos de la orilla del lago con el terreno de acampada libre al fondo. |
 |
Imagen a mi espalda tomada desde el mismo lugar
|
 |
| La orilla opuesta del lago |
.
 |
| Puentecito que atravieso tanto a la ida, como de regreso a casa. No es el único paso; pero me gusta el sonido de la madera. |
Con un entorno así, hasta la ardilla más exigente estaría contenta. Ánimo, amiga, hay que superar el desánimo y mirar hacia adelante. Ultimamente no tengo demasiado tiempo para comentar en los blogs, pero procuro pasarme de vez en cuando. Un abrazo.
ResponderEliminarQue bonito, Ardilla. Paseas y nos enamoramos de tus paseos por esos árboles donde la galanura del otoño despierta emociones.
ResponderEliminarSabes, en mi nuevo blog, dedicado a la fotografía, hay una parienta tuya. Espero que la visites. Sería un honor para ella.
Besos,
Luis.
Así cualquiera, ¡qué envidia!
ResponderEliminarMe alegro mucho por ti, cuando pasees acuérdate de las que tenemos que andar entre coches.
Besos.
¿Cuándo quedamos?
ResponderEliminar;))
Besos de paseo revitalizante...
Mis lugares de paseos son distintos pero no menos bellos.
ResponderEliminarSe trata de la orilla del mar, entre esteros de marismas y olor a yodo, y a salitre, y a silencio...
Qué reconfortantes vistas. La tranquilidad al alcande de tus pasos.
ResponderEliminarY pensar que la vida nos regala estos momentos y muchas veces ni los vemos...
Bien por ti, que has sabido apreciarlo.
Un abrazo
Que hermoso lugar.
ResponderEliminarSin dudas el entorno inspira.
Saludos desde muy lejos
Hola Ardilla, tu eres una privilegiada de poder pasear por estos lugares.
ResponderEliminarClaro así que siempre tienes inspiración.
Besos
Hola Ardilla.
ResponderEliminarLa vista de ese lago debe ser una verdadera maravilla y el contacto de los sentidos con esos paisajes, inolvidable. Me imagino cómo debe de oler esa tierra cuando acabe de visitarle la lluvia...
Gracias por el paseo.
Un abrazote.
Maat
Vives en un paraíso verde, no me extraña que te trasmutes en ardilla para saltar de árbol en árbol.
ResponderEliminarUn beso.
ohhhh qur bonito, una pregunta, donde esta exactamente la zona de acamapada libre, en este lugar??? por mucho que intento buscarl no encuentro en ningun sitio acamada libre en funte del Alamo, ojala pudieras contestarme porque me ha encantado y m gustaria ir a pasar unos dias, un saludo, gracias.
ResponderEliminarAlgo tarde, pero igual contesto. En Fuente Alamo no hay lago. Y acampada libre como no sea bajo cualquier almendro, no se
Eliminar