Primero llamó mi atención el color rojizo que adquirieron los papeles de mi mesa. Miré hacia la ventana, esperando ver un cielo ensangrentado por la puesta del sol, pero no fue así. Se veía azul, sin embargo la imagen de los árboles era difusa, parecida a la que ofrece el panel granulado de la cabina de la ducha. Me levanté a prepararme un té y descansar los ojos, pero al volver todo seguía igual.
Me acerqué a la ventana y efectivamente, la superficie del cristal estaba rugosa. Al pasar el dedo por ella, percibí una consistencia que me recordó a la gelatina y el trasluz del vidrio, se tornaba de color rosado al mínimo roce.
Llamé al cristalero de inmediato explicando lo que ocurría, y la gravedad de la situación hizo que estuviera en casa a los pocos minutos. No había duda, mis cristales sufrían de alergia severa al sol. Lo único que se podía hacer, era mantener los postigos cerrados en las horas diurnas.
He observado de cerca mis ventanas durante varios días y de momento los otros están sanos. A los del despacho, para que no olviden lo que son, les abro las contrapuertas unas horas por la noche y cuando llueve, dejo que se mojen. Se desviven por hacerme guiños reflejando la luna en cada gota, pero dudo que sean felices, una vida sin sol ha de ser muy triste.
¿Os imagináis unas persianas siempre cerradas porque el sol daña los cristales?, ¿o unas gafas que no pueden salir a la calle? ¡¡¡Qué sería de los que no podemos usar lentillas!!!
Podéis encontrar más propuestas en:En el pais de la incertidumbre http://rodriguezdesousa.blogspot.com/
No! No me lo puedo imaginar, que feo! Siempre tengo todas las persianas abiertas, aún los dias de sol arrasador. Me ponen triste los ambientes oscuros :(
ResponderEliminarCuanta creatividad hay en ese árbol Ardi !!
un beso
Jajaja maravillosa imaginación, tus cristales son vampiros...
ResponderEliminarTu texto me hace reflexionar y pienso que cuanto mayor nos hacemos más tememos a la noche y más adoramos al sol. Los jovenes (iba a decir idolatramos pero yo ya me quedo fuera) idolatran la nocturnidad, la noche, el trasnochar, sin embargo, los que nos hacemos mayores amamos los amaneceres, pasear por la mañana...pufff esta noche salgo, jajaja.
Besos.
jajjajaja...muy original el divague y poética la manera de contarlo.
ResponderEliminarUn abrazo!
NUUUUUUU, YO NO ME IMAGINO , CON VENTANAS CERRADAS, ES LO QUE HAGO NI BIEN ME LEVANTOOOOOO ¡¡¡
ResponderEliminarLA LUZ NATURAL ES VIDA, ES ENERGIA
MUY BUEN RELATO¡¡¡
BESITOS ARDI
ostras ardi!! YO TENGO ALEGIA AL SOL JEJEJE buenos me suele salir si me paso porque soy muy blanquita
ResponderEliminarbuen relato original y bueno esperemos que no pase ..
besazos de viernes ya voy adelantando jajajaja
Ardilla. Con una preciosa idea: los cristales enferman, has escrito un texto lleno de encanto y sensibilidad.
ResponderEliminarMe guardo la frase para un posible poema, si me das el permiso.
Muchas gracias por dedicar un "posit" para que todos los que pudieran se enteran de qué iba esto. Ardilla, has sido una excelente madrina. (Que no se ponga celosa, Mercedes, jajaj)
Un beso,
Juanma
Los cristales son siempre importantes en la vida de las personas.Extraordinariamente bello.Me ha gustado mucho.Un saludo.
ResponderEliminarPobres cristales y pobre la gente que viva dentro de esa casa, a mí me encanta la claridad.
ResponderEliminarMuy bueno Ardi, tienes una imaginación rebosante.
un beso
¡qué imaginación! Muy sugerente. Felicidades.
ResponderEliminarME ENCANTARIA ARDI...ASI NO TENDRIA QUE LIMPIARLOS.CON MI COMPULSION NO PUEDO VER UN CRISTAL SUCIO¡¡¡AHHHHHHHHHHHHHHH!!
ResponderEliminarY COMO PUEDO LLEVAR LENTILLAS.
ERFES LA LECHE REINA,JEJE.
BESOS
uys que cosa mas triste, unos cristales alergicos al sol, sin poder reflejar mas que la frialdad del la luna esa luz mortecina y blanca, obligados a vivir la noche... uys con lo que les confunde a algunos espero que a tus cristales no les pase eso
ResponderEliminarArdillita,
ResponderEliminarnoooo,¿porque te has cargado todos los cristales? que frio en invierno, brrrrrrr.
Claro, como en tu arbol no hay, pues a los humanos que les den, ja,ja.
La musica de Tajabone preciosa, me encanta.
Besosss
Muy ocurrente tu escrito, me has dejado pillado...no me gustaría ser "cristal" pues necesito el sol como el que más...
ResponderEliminarUn saludo.
Ah! ¿Qué sería de las gafas de sol?
Muy bien narrado tu relato, Ardi. No. No me puedo imaginar tan sólo oscuridad. Sería terrible.
ResponderEliminarUn abrazo
Sería muy triste, estaría todo oscuro y no querríamos estar en casa para nada.
ResponderEliminarMuy original
Un beso
Tienes toda la razon, Ardillita.
ResponderEliminarNo lo entendí.
Y es que a esas horas... volvía de cenar y tomar una copita....entré a publicar el mio que ya lo tenia preparado, y se ve que estaba espesita anoche.
Lo he vuelto a leer y solo enferma, pero de todas formas me da penita.Pobres de nosotros, si los cristales le tuvieran alergia al sol.
Un beso
Muy bueno tu relato, sin cristales todo será diferente.Un saludo.
ResponderEliminarme demoré en comentar..... después de leer tu relato, tan poético y convincente, fui a ver mis ventanas. Todo en orden por suerte...pude abrir las persianas y ver el sol!!!! me gustó la música, casi tanto como el relato.
ResponderEliminarcariños!!!
Una idea original y muy bien escrita, Ardillita.
ResponderEliminarJolines te veo dándole jarabe a tus cristales para que se pongan buenos (jeje).
La solución siempre estaría tambien en utilizar materiales plásticos, que le vamos a hacer...
Un beso de cristal ahumado
Huy, Ardilla, se me nubla el cristalino nada más pensarlo. La verdad es que no nos planteamos este tipo de cuestiones, pero sería nefasto. Quita, quita, busquemos un spray que mantenga los cristales limpitos y colguemos el sol en las ventanas.
ResponderEliminarUn beso sin cristal (que te llegue bien).
Y las vidrieras de las iglesias, de las catedrales... Y estos edificios modernos que están construidos de acero y cristal. Sucumbirían como los grandes saurios.
ResponderEliminarUna idea muy original.
Un abrazo,
Ramón
Muchas gracias corazones de melones. Es un placer, ver la huella de vuestro paso por aquí.
ResponderEliminarUn abrazo con licor de avellanas
Con lo maravillosos que son los días soleados, ¡no poderlos disfrutar o sentir cómo te acarician con su calor! wuap.. creo que tus cristales se deprimieron aunque tú los cuidabas para que no sufrieran más.
ResponderEliminarBello relato e hipótesis nada atractiva; por suerte solo es eso!
Un beso de cristales transparentes.
Original y, al mismo tiempo me ha parecido poético; trájico y poético. Me gustó mucho Ardilla, de verdad.
ResponderEliminarBikiños
Hola, Ardilla: Tu relato es precioso. La de horas que vivimos junto a los cristales de nuestros despachos. No me extraña nada el cariño con que los cuidas.
ResponderEliminarMe ha cautivado esta frase:...Se desviven por haceerme guiños reflejando la luna en cada gota.
Un abrazo con mucho sol.
Maat
Después de estar alejada, vuelvo para encontrar esta maravilla...
ResponderEliminarTonterías que digo, si siempre encuentro maravillas en este blog.
Cristales alérgicos en las ventanas...
¿¿Ya dije que me paeció maravilloso??
Besotes ardilla..
Pues que puedo decirte...a mi con la falta que me hacen!
ResponderEliminaren fin, que la idea es màs que original, felicidades!
Hay hija, pues al paso que vamos con lo de la capa de ozono, espero que este relato no sea premonitorio,jeje. Muy bueno ardillita, hay que ver las cosas que se te ocurren,jajaja
ResponderEliminarUn besote
Con lo bello que es a través de ellos, admirar la luz, sus reflejos,los prismas que provoca a través de ellos.
ResponderEliminarQue pena si eso sucediera...
Besos.
Nyma
Lo tuyo si que es imaginación, yo casi prefiero no imaginarmelo porque me entraría mucha tristeza estando siempre en la penumbra.
ResponderEliminarPrecioso relato y gran imaginación la tuya.
Un abrazo de Mar
ARDI: me puedo llevar el posit de sábado literarios para el próxima sábado? besos y buen domingo.
ResponderEliminarHUY YO ME ENFERMARIA EN UN MUNDO ASI , NO PODRIA VIVIR SIN LA LUZ QUE DEJAN PASAR MIS CRISTALES Y EL CALOR QUE ME DAN EN PRIMAVERA Y LES DA EL SOL A ELLOS , UN MUNDO MUY TRISTE SERIA ESE ,MIRA PODRIA VIVIR SIN PERSIANAS YA QUE NO LAS USO CASI , PARA TENER SIEMPRE EL PAISAJE DE LA CALLE A MANO. Y EN CAMBIO NUNCA SE ME OCURRIO PENSAR EN LA POSIBILIDAD DE MIS CRISTALES ENFERMOS , ARDILLA AMIGA EN TU ARBÓL TIENES MUCHA CREATIVIDAD QUE SEGUIRE DISFRUTANDO DESDE MIS 21 GRAMOS UN ABRAZO GRANDE TESORO .
ResponderEliminarLo primero beso a la ardillita en nuestro reencuentro :))
ResponderEliminarRelato breve(como a mi me gustan), con las palabras justas y con una hipotesis original pero aterradora.
Los cristales no pueden enfermar
Si se caen las vidrieras de la catedral de aachen me da un mal!!
;)
Muy original, de veras.
ResponderEliminarAbrazote, ¡Qué retraso llevo!
Otro realto tuyo que es fantástico ardilla.
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